Por um jornalismo de relatos e emoção

Experiência crucial: participar como jurado do maior prêmio jornalístico da América Latina e conhecer a FNPI (Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, criada por Gabriel García Márquez em Cartagena, Colômbia), permitiu a este observador reencontrar a vitalidade cultural de um continente que não aparece em nossa imprensa.

Fazemos parte da Iberoamérica sob o ponto de vista formal, nossas editoras publicam García Márquez, Vargas Llosa, Borges, Sábato, Eloy Martinez, Carlos Fuentes, Octávio Paz, Roa Bastos, Cabrera Infante, os críticos resenham novos lançamentos e novos autores, mas nossa imprensa só reflete a imprensa latino-americana para referenciar notícias sensacionais.

Temos na ponta da língua os nomes de alguns dos maiores veículos jornalísticos continentais, mas deles só conhecemos as aparências. Ao examinar os 25 semifinalistas na área de texto (de um total de 611 trabalhos remetidos e aceitos), este observador percebeu que no Brasil vivemos em outro mundo. [Ver, abaixo, a ata do julgamento, em espanhol.]

Nem melhor, nem pior – diferente. Essa diferença é o nosso problema. Não há vizinhança, porosidade. Recusamos a densidade européia, dos americanos escolhemos o seu lado mais mundano, e ao preferir as praias do oceano Atlântico optamos pelo vazio. Vamos a Buenos Aires, Machu Pichu ou mesmo Havana empurrados pela compulsão de movimento (‘Já estive lá’). Não ouvimos o que lá se diz. E o que lá se imprime.

São surpreendentes as 22 matérias semifinalistas não-brasileiras. O que antigamente era aqui injustamente considerado como ‘beletrismo latino-americano’ aparece sob a forma de um pujante renascimento narrativo que não se restringe à imprensa dita ‘alternativa’. Chega aos grandes diários, caso do argentino Clarín, que publicou um dos cinco trabalhos finalistas – ‘Juan y la carta de amor que venció su tristeza’, comovente história onde o jornalista investiga, testemunha, participa e, sobretudo, traz o leitor para dentro de um acontecimento que freqüentou as manchetes (o incêndio de uma danceteria de Buenos Aires).

Surpreende encontrar nada menos do que 8 matérias entre as 25 semifinalistas publicadas num mesmo mensário colombiano de luxo, Gatopardo, e assinadas por profissionais de todos os cantos do continente (a revista foi recentemente comprada por um grupo mexicano).

Entre anúncios de relógios caríssimos, champanhes e carrões da última geração, relatos jornalísticos brilhantes, textos esmerados, impactantes. Nenhuma relação com o nosso badalado mundo das revistas pavimentado pelas fofocas, auto-ajuda de diferentes matizes (sobretudo sexuais) e o ‘jornalismo de serviço’ (disfarce para os apelos consumistas).

O ganhador na categoria de texto – ‘Las mentiras de um héroe oficial’, de Carlos Paredes, publicado na revista peruana Etiqueta Negra, também de alto nível gráfico – é uma corajosa investigação sobre um herói cultuado pela mídia na luta contra o terrorismo e finalmente desmascarado.

Três trabalhos brasileiros foram incluídos entre os 25 semifinalistas: ‘A infância no limite’, assinada pelo repórter Mauro Konig e publicada na Gazeta do Povo de Curitiba, desvenda as redes de prostituição infantil nas fronteiras do Brasil e mapeia o tráfico de crianças e adolescentes do Brasil profundo e sórdido. Parcialmente prejudicada pela publicação numa única edição – contrariando, assim, um dos pressupostos dos jurados que buscavam a valorização do periodismo, o jornalismo diário e contínuo.

‘A dinastia das ruas’, de O Globo, assinada por Ruben Berta, Cristiane de Cássia, Selma Schmidt e Taís Mendes, é um primoroso resgate do jornalismo de rua, hoje praticamente vencido pelo jornalismo asséptico das redações. Não foi ajudado pela opção dos editores em compactar aquele rico material num único caderno especial, ao invés de distribuí-lo em diversas edições.

‘Os homens de bens da Alerj’, também do Globo, assinada por Angelina Nunes, Carla Regina Rocha, Dimmi Amora, e Maia Menezes, é talvez uma das matérias mais premiadas da imprensa brasileira contemporânea. Com toda a justiça. Reportagem investigativa clássica, planejada dentro da redação mas executada na rua, nos arquivos, na internet, sem qualquer suporte de fitas e vídeos suspeitos. Publicada sob forma de série, avolumou-se naturalmente e chamou a atenção dos jurados pela forma viva de recolher e apresentar a enorme massa de informações sobre as trapaças dos deputados estaduais fluminenses. Para os jurados, a corrupção é o câncer que corrói o continente. Cabe a imprensa denunciá-lo.

Importante registrar entre os cinco finalistas a dramática série ‘Sueño que les cuesta la vida’ (diário El Nuevo Dia, de Porto Rico), sobre os jóqueis que não podem engordar e seus sacrifícios para perder peso. O outro lado de um esporte impiedosamente magro, sem glória ou glamour.

Os trabalhos não dependiam de infográficos. O legado jornalístico de García Márquez vai na direção contrária à da Universidade de Navarra. Em Cartagena, o jornalismo de resultados perdeu a parada para o jornalismo humanista.

El jurado de la categoría de texto del Premio Nuevo Periodismo CEMEX+FNPI, conformado por Alberto Dines (Brasil), Francisco Goldman (Guatemala/Estados Unidos) y Javier Darío Restrepo (Colombia), se reunió en Cartagena los días 1 y 2 de junio de 2006 para elegir a los nominados y al ganador.

Fueron 25 trabajos los que conformaron la selección oficial que revisó el jurado para elegir a los nominados y al ganador. Este grupo de materiales fue el resultado del prejuzgamiento al que se sometieron las 511 piezas participantes, que en primera ronda fueron revisadas por Armando Alfaro (Colombia), María Sixta Bustamante (Colombia), Mauricio Gaviria (Colombia), Miriam de Paoli (Brasil), Gustavo Tatis (Colombia) y Flavio Vargas (Colombia); y en segunda ronda, por Francisco de Gois (Brasil), José Luis Novoa (Colombia) y Alberto Salcedo (Colombia).

Entre los trabajos de la selección oficial, el jurado nominó a:

**Carlos Martínez, por ‘La tormentosa fuga del juez Atilio’, de El Salvador, publicado en lá revista Gatopardo. La historia logra retratar la realidad de la justicia latinoamericana. Hay contexto y um excelente uso de herramientas narrativas propias de la literatura, como el suspenso. Se destaca la agudeza y sensibilidad del reportero, la habilidad narrativa y la transparencia com la que construye la historia, lo cual permite identificar y validar las fuentes. No hay discursos ni editorialización, a partir de los hechos y una revisión histórica deja em evidencia la pasión por la justicia del protagonista y lo amenazante de la impunidad.

** Antolín Maldonado, por ‘Sueño que les cuesta la vida’, de Puerto Rico, publicado en el diario El Nuevo Dia. A través de un buen trabajo de investigación, presenta la otra cara de la información deportiva. Retrata la desesperación de unos jóvenes por sobrevivir, lo cual los lleva al extremo de arriesgar su vida. Pone sobre la mesa una problemática social muy actual como la bulimia. Hay una crítica sustentada contra la indiferencia de las autoridades del submundo de las carreras de caballos.

** Pablo Calvo, por ‘Juan y la carta de amor que venció a su tristeza’, de Argentina, publicado en el diario Clarín. Donde otros reporteros solo vieron una catástrofe, este periodista encuentra una historia humana en cuyo desarrollo él intervino hasta culminar en la carta de amor. Tiene un valor de hallazgo, pues trasciende a la catástrofe. Destacamos que a pesar de no tener el vigor de la noticia diaria, el periódico supo incluirla en su agenda como información destacada. La pieza tiene un poder metafórico y una fuerza narrativa que atrapa al lector y transmite emoción.

** Angelina Nunes, Alan Gripp, Carla Rocha, Dimmi Amora, Flávio Pessoa, Luiz Ernesto Magalhães e Maiá Menezes, por ‘Homens de bens da Alerj’, de Brasil, publicado en el diario O Globo. Se destaca el trabajo en equipo y la planificación de la investigación desde una redacción metropolitana, lo cual permite que el problema de la corrupción sea abordado desde la base. Se siente que el equipo salió a la calle con un plan de trabajo que les permitió construir uma serie completa, con austeridad del lenguaje. Un tema como la corrupción del poder, que tiende a tratarse con superficialidad y como algo socialmente tolerado fue trabajado por el equipo con meticulosidad y persistencia, con lo cual lograron construir un cuadro profundo de una problemática que toca a toda América Latina.

Como ganador fue elegido:

** José Carlos Paredes, por ‘Las mentiras de un héroe oficial’, de Perú, publicado en lá revista EtiquetaNegra. El periodista logró darles relevancia a personajes que habían sido marginados de esta historia y que visibilizan la corrupción. Con una profunda investigación y un serio manejo de las fuentes logra construir una pieza narrativa conmovedora y de impacto para la sociedad peruana e incluso latinoamericana, que sacude las alfombras y derriba íconos. Hay un sabio manejo del lenguaje y una marcada voluntad por sacar a la luz una verdad obstinadamente ocultada. Destacamos en este trabajo la paciencia del investigador y el rigor con el que se examina cada dato, lo cual demuestra su preocupación por rodear de credibilidad la historia.

El jurado quiere resaltar que se tuvo en cuenta que los trabajos fueran eminentemente periodísticos, lo cual implica ante todo periodicidad en la entrega de la información y se trató de estimular el periodismo narrativo y de profundidad en los diarios. Para tratar de definir la pieza periodística ideal y en concordancia con las bases del premio, el jurado tuvo en cuenta los siguientes aspectos:

1. Buen manejo de fuentes;

2.La investigación autónoma y planificada;

3.Manejo del lenguaje;

4. Pertinencia social del tema;

5.Comunicabilidad: la fuerza narrativa y claridad del texto.

En constancia firmamos, Alberto Dines (Brasil), Francisco Goldman (Estados Unidos), Javier Darío Restrepo (Colombia)