LA VANGUARDIA
"Entre bastidores de unas entrevistas", copyright La Vanguardia, 17/11/02
"La sección ?la contra? que aparece todos los días del año en la última página de ?La Vanguardia? (los domingos en el suplemento Revista), suele suscitar dudas y comentarios de lectoras y lectores que llaman o escriben al defensor.
En una carta enviada por correo electrónico, el lector Fernando Martínez Vallvey, de Salamanca, me solicita que inquiera acerca de las técnicas redaccionales utilizadas en la citada sección diaria de entrevistas.
Acepto el encargo, por supuesto. Una de las funciones que el Estatuto del Defensor del Lector atribuye a este puesto de mediación es explicar, siempre a instancias de los lectores, el proceso seguido en la preparación y elaboración del material periodístico.
Expongo, de entrada, la petición formulada por el citado lector: ?Las entrevistas de ?la contra? suelen llevar un pequeño texto, normalmente en la parte superior, escrito en primera persona que podríamos denominar breve currículum. Me gustaría saber si la primera persona es simplemente un recurso estilístico o se le pide al entrevistado que lo escriba o aporte sus principales rasgos para redactar este breve texto?.
Los periodistas Víctor Amela, Lluís Amiguet e Ima Sanchís contestan en los siguientes términos a las preguntas del defensor.
?La entrevista de ?la contra? -dicen- consta de cuatro piezas diferenciadas: 1) Fotografía; 2) Ficha: son las líneas que aparecen a la izquierda de la fotografía, que enumeran una serie de datos personales del entrevistado. 3) Billete: columna central de color naranja en la que plasmamos alguna impresión personal sobre el entrevistado y completamos el perfil. 4) La entrevista en sí.?
Añaden los responsables de la sección: ?El amable lector Martínez Vallvey se interesa por la elaboración de la ficha. Esta pieza no encierra ningún misterio: cualquier lector habitual de ?la contra? habrá observado que la ficha presenta una estructura interna fija. Es la respuesta del entrevistado a un cuestionario cerrado acerca de los siguientes datos personales (en este orden): A. Edad / B. Lugar de nacimiento. / C. Profesión. / D. Estado civil. / E. Número de hijos. / F. Ideas políticas. / G. Creencia religiosa. / H. Última obra profesional realizada?.
Reacción de los entrevistados
Todas las personas entrevistadas responden a los ocho apartados del cuestionario?, cabe preguntarnos.
Contestan los periodistas: ?El entrevistado accede gentilmente a que publiquemos estos datos en primera persona del singular, un recurso estilístico que -en nuestra opinión- acerca el personaje al lector, estimula la proximidad entre ambos?.
Más datos relativos a los entre bastidores de estas entrevistas: ?No todos los entrevistados -matizan sus autores- responden siempre a todas las cuestiones enumeradas. En tal caso se echará en falta alguno de esos datos en la ficha. Pero no es lo habitual: hemos de agradecer a la inmensa mayoría de los entrevistados la cordial disponibilidad con la que nos facilitan dichos datos?.
Una respuesta que inquieta
Algunas personas que llaman al defensor, a propósito a veces de otros aspectos relacionados con el tratamiento de la religión en el diario, me interpelan sobre el elevado número de entrevistados que se declaran, directa o indirectamente, indiferentes, agnósticos o ateos. Es una percepción significativa.
Una carta del lector Alfonso Bernad López, de Barcelona, contiene unas observaciones a este respecto. Pregunta al defensor del lector: ??Es que está en el libro de estilo que las entrevistas en ?la contra? hayan de ser, preferentemente, a personas que se manifiestan no católicas??. En el mismo sentido atendí una llamada del lector Ramón Ribas.
No está en el libro de estilo, por supuesto. Tampoco es razonable pensar que se seleccionan a las personas para ser entrevistadas después de hurgar en sus convicciones íntimas o de obligarlas a declarar sobre sus creencias religiosas. Lo impiden la ética más elemental y la Constitución española de 1978 (artículo 16.2.). Un entrevistado en ?la contra?, Ramón Sánchez Ocaña, lo recordaba implícitamente en la edición del pasado 18 de julio al contestar así a este apartado del cuestionario: ??Dios? Mi voto es secreto?. Todos son libres, por supuesto, de negarse a dar este dato. Pero tienen también derecho a rellenar esta parte de la ficha. Nadie se lo puede impedir ni reprochar.
Los tres periodistas de ?la contra? aportan la siguiente observación respecto a esta parte de la pieza: ?Sí hemos constatado que los entrevistados de origen anglosajón suelen plantear más reservas a la hora de exponer públicamente sus convicciones políticas y religiosas, mientras que los de origen latino no muestran reparos en explicarse, y suelen hacerlo incluso con profusión de argumentos y reflexiones?.
Otro misterio de ?la contra? es la ausencia de numeración de página y de fecha. El pasado miércoles, el lector Francisco Nogueira García, de l’Arboç (Baix Penedès, Tarragona), me explicó en una carta que le gusta coleccionar algunas entrevistas de ?la contra?, y formula una queja: ?A la hora de archivarlas me encuentro con que la fecha no aparece en la cabecera de esta última página?. Lleva razón este lector y otras personas coleccionistas de textos que en otras ocasiones me han señalado esa carencia.
He planteado este asunto a los responsables de Redacción. Reconocen que no tiene mucho sentido que no figure este dato. Me aseguran que lo incluirán próximamente."