Jens Weidmann preside el banco central de Alemania, primera potencia europea. EL PAÍS le entrevistó en la sede de la entidad en Fráncfort, y esa entrevista, publicada a toda página el sábado 13 de diciembre, en la que se le preguntaba sobre el programa de Podemos, ha provocado inmediatas reacciones.
Varios lectores me han escrito quejándose porque la interpretan como un ataque a este partido, basándose, sobre todo, en el titular de primera página: El Bundesbank dice que las propuestas de Podemos amenazan la economía. Por debajo, el sumario precisaba: “Jens Weidmann, presidente del banco central alemán, asegura a EL PAÍS que no pagar la deuda pondría en peligro el ahorro de los ciudadanos”.
No voy a citar algunos de los correos, porque contienen acusaciones contra Weidmann fuera de lugar, o están redactados en un tono inaceptable, pero sí quiero abordar la cuestión basándome en otros mensajes.
Juan Ignacio Pozo considera tendenciosa la entrevista en sí misma. “Como lector de EL PAÍS día a día desde hace casi 30 años lamento la continua agresión de su periódico a Podemos. Personalmente tengo muchas dudas sobre el programa político de Podemos, pero no tengo ninguna sobre la campaña de EL PAÍS contra este nuevo partido, que hoy se traduce en una entrevista en la que desde el Bundesbank, ¡oh sorpresa!, se nos advierte de que Podemos es el lobo feroz que va a acabar con la economía occidental. ¿Qué esperaban que dijera?”.
Luis Doncel, corresponsal de EL PAÍS en Berlín, que firma la entrevista, no lo ve así. “Al margen del juicio que el Bundesbank pueda merecer a cada cual, veo pocas dudas sobre el interés por conocer de primera mano las opiniones del presidente del banco central más importante de la zona euro, que además fue un asesor cercano de Angela Merkel y que tiene una influencia importante en la opinión pública alemana”. Se trataba de una entrevista conjunta con los diarios Le Figaro y La Repubblica, y como suele suceder en estos casos, “los periodistas pactamos que tras una primera parte general, cada uno plantearía los temas que interesan en su país. Yo pregunté a Weidmann por la situación económica de España, las reformas del Gobierno y por las propuestas de Podemos en torno a la deuda. Creo que era obligado pedirle su opinión sobre el programa de un partido que aspira a gobernar España en un año y que, en caso contrario, no habría hecho bien mi trabajo”.
“Yo mismo le informé de que Podemos ha ido matizando sus ideas sobre una posible reestructuración de la deuda, y actualmente planea una auditoría para determinar qué parte de la deuda es justa y qué parte habría que renegociar. Él mantuvo sus críticas a esta propuesta, que considera muy negativa para la estabilidad del sistema financiero y la economía española, como decía el titular de primera”.
Miguel Jiménez, redactor jefe de Economía, añade: “La entrevista me gustó mucho y el día previsto para su publicación decidí abrir la sección con ella, pues me parecía lo más interesante que llevábamos ese día en Economía. Luego, en la reunión de primera, elogié la entrevista al exponer su contenido”.
Previsible o no, lo que dice Jens Weidmann tiene indudable interés
No es tanto el contenido como el titular de portada lo que disgusta a Juan Lois Mosquera y a Emilio Panizo. Este último escribe: “Lo que dice Jens Weidmann, presidente del banco central alemán, es que ‘dejar de pagar la deuda supondría riesgos muy importantes que dañarían la economía’. Igualar ‘dejar de pagar la deuda’ con ‘las propuestas de Podemos’ es una simplificación intencionada”.
Y Cristina Buhígas señala: “Advertencia catastrofista sobre el impago de la deuda por parte de Podemos y desmentido al final: ‘Podemos… propone una reestructuración ordenada de la deuda o un impago pactado’. Es decir, el Plan Brady que se realizó en Latinoamérica y que José Carlos Díez pedía para la eurozona en EL PAÍS un día antes. Parece, una vez más, que el periódico del que soy suscriptora tiene el mismo objetivo que el Gobierno del PP: asustar a los españoles sobre Podemos”.
David Alandete, director adjunto, explica: “El titular de primera página del 13 de diciembre de 2014 obedece a los mismos criterios que cualquier entrevista que se publica en ese formato y espacio. Al presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, se le pregunta: ‘¿Qué opina del nuevo partido Podemos, que defiende una auditoría de la deuda para ver qué parte hay que pagar y cuál no?’. A lo que él responde: ‘Dejar de pagar la deuda no es un símbolo de fortaleza. Supondría riesgos muy importantes que dañarían la economía y que podrían cortar el acceso al mercado de capitales. Si los bancos locales tienen una gran parte de la deuda pública, peligraría también la solvencia del sistema financiero y los ahorros de los ciudadanos”.
Alandete continúa: “El impago de la deuda, pactado o no con los acreedores, es parte central del programa de Podemos, tanto en las europeas como en su propuesta económica con vistas a las elecciones generales, en la que se plantea una quita pactada. El propio Weidmann lo dice: esta propuesta de Podemos ‘supondría riesgos muy importantes que dañarían la economía’; de ahí el titular: El Bundesbank dice que las propuestas de Podemos amenazan la economía, que es completamente fiel a las declaraciones del entrevistado”.
Por más que la opinión de Jens Wiedmann les parezca previsible a algunos lectores, eso no resta interés a sus respuestas. Sus opiniones son importantes, y por eso los principales periódicos han procurado entrevistarle. Nuestro trabajo como periodistas es buscar la información relevante allá donde se encuentre.
No siempre, sin embargo, conseguimos que se nos entienda. Prueba de ello es la irritación que provocó un titular de la web de EL PAÍS, del 12 de diciembre, que bajo el epígrafe de Ciencia decía: El estudio que asegura que los hombres son “idiotas”.
Varios lectores me han escrito muy enfadados. Tras expresar su más completa repulsa “al titular sexista”, Mario Blasco Blanco argumentaba: “No tengo la más mínima duda de que ese titular vejatorio e insultante jamás habría visto la luz si donde pone ‘hombres’ hubiera puesto ‘mujeres”. Otro lector, que firma su correo como José G. T., se pronunciaba en parecidos términos.
Antonio Miguel Castellano Suárez escribía por su parte: “Inaudito que un medio de comunicación mínimamente, no ya serio, sino respetuoso con los lectores y la ciudadanía, se permita insultar de esa manera tan zafia, cobarde y miserable (enmascarada en forma de supuesta noticia) a la mitad de la población”.
Patricia Fernández de Lis, responsable de Ciencia y Tecnología, me explica: “La noticia, con notable carga humorística, hace referencia a un estudio publicado por la prestigiosa revista British Medical Journal, que recoge en su especial de Navidad los más curiosos del año”. En este caso, se trata de una investigación realizada en Reino Unido “en la que se repasa la lista de ganadores de los sarcásticos Premios Darwin, que se otorgan póstumamente a aquellas personas que mueren de forma absurda, y sin descendencia, evitando así que sus genes se perpetúen. De los premiados en las dos últimas décadas, 282 eran hombres y 36, mujeres. La conclusión literal de la investigación era: ‘Estos resultados son totalmente consistentes con la teoría de la idiotez masculina y apoyan la hipótesis de que los hombres son idiotas y los idiotas hacen tonterías”.
Lo cierto es que la noticia fue recogida por buena parte de la prensa internacional con titulares parecidos. No sé si los españoles tenemos menos sentido del humor o si los respectivos Defensores del Lector (en los diarios que cuentan con esta figura) han recibido las mismas críticas que yo.
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Lola Galáné ombudsman do El País